Dublín cuenta con una gran variedad de tours: recorridos literarios de pubs, degustaciones de cervezas Guinness, paseos por el Trinity College todo este mundo ahora es mostrado por indigentes que son contratados como guías turísticos y reciben una paga de 10 euros (216 pesos aproximadamente).
Una crisis de personas sin hogar en la capital de Irlanda ha provocado el lanzamiento de un programa de hacerlos guías de turistas en recorridos al interior de calles arenosas y una desesperación silenciosa que los turistas rara vez ven.
“Simplemente no tenemos el personal para la cantidad de personas que trabajan formalmente en eso“, dijo Derek McGuire, quien dirigió un reciente recorrido por la calle Secreta a través de las Libertades, un vecindario histórico de cuello azul, menciona The Guardian.
La ruta de 0.8 millas (1.3 km) incluye áreas donde McGuire solía dormir mal durante dos años después de perder su hogar en 2014. El recorrido dura 90 minutos y cuesta 10 euros.
Indigente en calles de Irlanda (Imagen: Especial)
El comentario de McGuire incluye consejos para personas sin hogar sobre cómo mantenerse a salvo, esconder posesiones y mezclarse con las multitudes. Mezcla anécdotas sobre refugios, lo decente, lo malo, lo horrible, con historias sobre las épocas de los burdeles de las Libertades, una epidemia de heroína y “cuatro rincones del infierno”, una unión de cuatro bares conocidos por peleas.
“Dormir en el centro de la ciudad fue mi peor pesadilla. Tuve que ponerme la cabeza de Bear Grylls”, dijo McGuire.
Estas labores son la última evidencia de una crisis de vivienda en todo el país que ha inflado las rentas, empujó a la población sin hogar hacia 10 mil y creó una reacción política.
Derek McGuire, un guía anteriormente sin hogar, en un recorrido por la calle de Dublín (Imagen: Especial)
Miles de personas han marchado por Dublín en los últimos meses para exigir el control de alquileres y más viviendas de bajo costo, y acusar al gobierno de estar en los bolsillos de propietarios, desarrolladores y “fondos buitre“.
Los activistas han ocupado propiedades vacantes, lo que en algunos casos ha provocado enfrentamientos violentos con equipos de seguridad privados enviados para desalojarlos.
El desalojo de una familia en el condado de Roscommon el mes pasado provocó represalias especialmente fuertes: alrededor de 20 vigilantes enmascarados con bates de béisbol atacaron a los guardias de seguridad y los incendiarios incendiaron dos sucursales de KBC Bank en Dublín, que habían enviado a los guardias a recuperar la casa.
