La rutina laboral siempre ha sido parte de la vida de millones de personas, tener que llegar a un horario establecido, cumplir con los deberes, la hora de la comida y salida. Con la llegada de la pandemia, esto se modificó en algunos casos, pues hay quienes hacen su trabajo desde lugares remotos pero también ha cambiado el momento en el que hacen su trabajo.
Debido a esta clase de modificaciones han surgido nuevos modelos de trabajo incluso existen las jornadas de trabajo no lineales. Quienes cuentan con esta modalidad pueden llevar a cabo su trabajo alejado de lo tradicional.

Hay quienes hacen su trabajo desde lugares remotos . Fuente: Unsplash
Es así como se lleva a cabo el trabajo de forma asíncrona, lo que significa que el horario es diferente al de los compañeros. Así que los empleados pueden realizar tareas en horarios flexibles y concentrados repartidos a lo largo del día.
La intención de esta forma de trabajo es que los trabajadores articulen sus horarios de trabajo en torno a su vida personal en vez de disponer de horarios fijos y contratos.
Hace tiempo pasados, las jornadas laborales “no lineales” eran considerados como jornadas fuera de lo común, aunque debido a la llegada masiva de modelos de trabajo híbridos y a distancia, así como el acceso a horarios más flexibles y asequibles para sectores laborales que se mantienen activos.
Hay quienes llevan a cabo este tipo de trabajo en cierta medida y no se han percatado de ello. Puedes darte cuenta de esto cuando realizar proyectos a primera hora de la mañana o a última hora de la noche.
Es un hecho que no todos los jefes darán la oportunidad pero en la actualidad estas jornadas de trabajo no lineales tendrán mayor protagonismo en diversos sectores.
¿Cuáles son las ventajas?
Hay mayor control sobre el tiempo y aunque parecen ser el último producto de la pandemia en el mercado laboral, no son un nuevo concepto.
Debes saber que la pandemia se encargó de garantizar trabajo en el hogar con mayor productividad gracias a los descansos, el tiempo con la familia y trabajos en horarios flexibles.

Hay trabajadores que prestan sus servicios de forma no sincronizada. Fuente: Unsplash
La manera de trabajar puede ser cuando el empleado hace tareas específicas antes de que despierten los demás o después de las ocho de la noche.
Otro punto es que hay menor rigidez y como se mencionó, la productividad aumenta. Esto se debe a que en vez de cumplir con ocho horas de trabajo recorrido, el empleado tiene la oportunidad de realizarlo en horarios diferentes y que se adapten a su rutina.
Por otro lado, hay trabajadores que prestan sus servicios de forma no sincronizada, tomando en cuenta tareas o enviando correos electrónicos fuera del horario contratado.
Así que si los jefes se encargan de implementar jornadas no lineales de manera formal habrá un equilibrio entre el trabajo asíncrono y el exceso de trabajo.
Así que de esta manera es posible prevenir el agotamiento.
¿Te gustaría probar esta modalidad de trabajo? Puedes intentarlo.

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