Una de las propuestas insignia del gobierno de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) es echar para atrás parte de la Reforma Energética aprobada en 2013, durante el sexenio de Enrique Peña Nieto.
Los debates parlamentarios acerca de esta iniciativa tendrán lugar en abril de 2022. Lo que se busca es reformar nuevamente la Constitución para que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) controle el 56% de la producción de electricidad en México.
Cabe mencionar que la Reforma Energética de 2013 dejó en manos de empresas privadas la producción del 62% de la energía eléctrica en el país.
La Reforma Energética de AMLO buscará devolverle el control de la electricidad nacional a la CFE | Foto: Wikimedia Commons
Esta medida se tomó para aprovechar la tecnología e inversión extranjera en beneficio de la población. Lo que hacen es subastar energía a la CFE, que está obligada a comprar la energía más barata disponible en el mercado. Estos son los generadores eólicos y solares de la iniciativa privada.
El gobierno actual ha bloqueado permisos nuevos para este sector y le ha dado mayor participación a fuentes más costosas y contaminantes, como las termoe?éctricas, que operan a base de combustóleo (combustible que producen mayormente las refinerías mexicanas y que no tiene otra salida en el mercado) y gas. En los hechos, estas acciones han incrementado en los últimos meses los precios de la electricidad que pagas en tu recibo.
Sin embargo, expresó Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno de la CDMX:
“No nos dejemos engañar con lo que luego se dice de la reforma energética que presentó ahora el presidente de la República; porque están diciendo que con eso van a subir los precios: ¡puras mentiras!”,
El recibo de luz no sufrirá aumento de precio, afirmó Sheinbaum | Foto: Facebook CFE
La oposición mantiene la postura de que esta medida tendrá consecuencias graves en la economía de las familias mexicanas.
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