El “phishing”, de acuerdo con el SAT, es un método digital mediante el cual los delincuentes buscan robar la información confidencial de las personas. Principalmente, se utiliza para hacer mal uso de los datos bancarios de los usuarios de servicios financieros.
No obstante, también puede aplicarse para otros fines. En algunas ocasiones, el phishing se aprovecha de la información personal como el nombre, la dirección y los teléfonos de contacto de los internautas.
Esto con el objetivo de extorsionar o manipular a las personas y/o hacerlos caer en fraudes y estafas. Por esta razón, el SAT ha emitido una serie de recomendaciones para no caer en la trampa.
Hay sitios que se dedican a la extorsión que se hacen pasar por sitios de organismos oficiales | Foto: Pexels
Estos consejos de seguridad surgieron a raíz de la aparición de sitios fraudulentos que se hacían pasar por páginas oficiales de organismos tales como el SAT.
Así pues, el Servicio de Administración Tributaria ha exhortado a los contribuyentes a tomar ciertas precauciones. Primero, para realizar cualquier tipo de trámite en línea relacionado con la entidad fiscal, son necesarios los siguientes datos:
- RFC
- Correo electrónico
- Contraseña o e.firma
RFC, correo y e.firma o contraseña, los únicos datos requeridos por el SAT | Foto: Pexels
La página web del SAT nunca te pedirá tu nombre completo, tu dirección ni, mucho menos, tu información bancaria, toda vez que los trámites disponibles en su plataforma son completamente gratuitos.
Por otro lado, es importante que verifiques la dirección electrónica de cualquier sitio antes de capturar información personal. Puedes acceder al portal oficial del SAT a través de la siguiente dirección: https://www.sat.gob.mx
Toma todas las precauciones necesarias y evita ser víctima de la delincuencia. Proteger tus datos personales es proteger tu propia integridad.
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