Este lunes 3 de agosto, Virgin Galactic anunció que ha firmado acuerdo para colaborar con Rolls-Royce en el diseño y desarrollo de tecnología de propulsión de motores para aviones comerciales capaces de viajar a una velocidad tres veces mayor que la del sonido.
De acuerdo con Forbes, Virgin Galactic ha terminado la fase de revisión del diseño de su vehículo supersónico con la NASA y ahora sigue trabajar con la Administración Federal de Aviación (FDA por sus siglas en inglés) para crear un marco que certifique sus naves para poder volar.
La colaboración con Rolls-Royse servirá para el desarrollo de una tecnología de propulsión de motores ya que esta empresa cuenta con un precedente en fabricación de motores supersónicos cuando, en su momento, construyo los motores de los aviones Concorde.
EL modelo inicial es el diseño del March 3 el cual utiliza alas tipo delta triangulares y podría ser capaz de transportar entre 9 y 19 pasajeros a una altura superior a los 60 mil pies, el equivalente a 18 mil 300 metros de altitud, cerca del doble de la altitud de un vuelo comercial regular.
El desafío al que enfrentan es resolver los problemas que llevaron a la ruina al Concorde como el ruido generado por los motores y el elevado consumo de combustible.