La tarjeta de crédito empresarial es un producto financiero pensado para organizaciones y negocios. Te contamos sus características.
¿Qué distingue y cómo funciona una tarjeta de crédito empresarial?
- Las tasas de interés están pensadas y adaptadas para un negocio, a diferencia de las tarjetas de consumo personal
- Los estados de cuenta y reportes son personalizados, por lo que será posible realizar flujos de caja y contabilidad más eficiente
- Son alternativas de pago que te ayudan a diferir a plazos la adquisición de capital para financiar tus proyectos. Esto ayuda a mejorar los flujos de efectivo.
- En el caso en que las empresas otorguen viáticos o algunas prestaciones de gasto a los empleados, las tarjetas de crédito empresarial pueden ayudar a autorizar en qué y cómo gastan los empleados y durante cuánto tiempo.
Consejos para manejarlas
- Estudia las ofertas antes de tramitar una tarjeta de crédito. Como las instituciones financieras ofrecen distintas tarjetas, estudia la que mejor se adecúe a las necesidades de tu negocio. Hay que conocer CAT, tasas de interés, líneas de crédito, así como las penalidades en caso de pagos atrasados.
- No mezcles tus finanzas con las de la empresa. Esta tarjeta no debe ser usada para tus gastos personales, porque podrías ocasionar errores en los estados financieros y la contabilidad de la empresa.
- Conoce las finanzas de tu empresa. Si tu empresa no tiene buena salud financiera, las tarjetas de crédito empresarial pueden conllevar altos riesgos de sobreendeudamiento.
- Úsala para lo necesario. Es importante usarlas para adquirir cosas necesarias para financiar bienes de capital o proyectos de expansión. Es decir, cosas que te ayuden a ganar más dinero.
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