Inversiones alternativas: ¿Qué son y cómo entrar a ellas?
Añade diversificación a tu portafolio con estas alternativas para proteger tu dinero

En el mundo financiero, la diversificación de las inversiones juega un papel fundamental para mitigar riesgos y buscar oportunidades de rentabilidad. Además de las inversiones tradicionales en acciones y bonos, existen opciones menos convencionales conocidas como inversiones alternativas. Te contamos qué son y cuáles son sus pros y contras.
Las inversiones alternativas son formas de proteger tus ahorros, distintas a bonos, acciones o el efectivo. Son formas de inversión más complejas y arriesgadas que las convencionales, porque no están reguladas ni supervisadas por las autoridades. Pero debes tener cuidado con ellas, porque su riesgo es mayor, y no sustituyen a las inversiones tradicionales.

Entrar a rondas de inversión en empresas privadas es una forma de diversificar tu patrimonio || Fuente: Unsplash
Inversión empresarial
Es posible invertir en empresas no listadas en bolsa a través de rondas de inversión, prestando dinero a negocios, o participando en su infraestructura. En estos casos, o te vuelves dueño de parte del negocio, o la deuda que adquiere la empresa contigo es a través de deuda.
Esta forma de inversión ha sido popular en los últimos años, porque tiene el potencial de generar retornos más altos que las empresas listadas públicamente.

En ciertos casos, las colecciones también se consideran inversiones alternativas || Fuente: The Royal Mint
Otras inversiones alternativas
Invertir en oro, plata, semillas, petróleo, propiedades, o criptomonedas es también una forma de añadir diversificación alternativa. Otras opciones más arriesgadas incluyen el arte, los coleccionables, botellas de vino, o préstamos de usuario a usuario.
Pros y contras de estos vehículos de inversión
Por un lado, estas inversiones te brindan diversificación y el potencial de generar grandes retornos. Pero por otro lado, la estas alternativas conllevan tal complejidad que puede ser mayor que las inversiones tradicionales, y requiere mayores calificaciones. Por ejemplo, al comprar arte, es necesario contar con conocimientos para valuar una obra, un proceso que puede llegar a ser más complicado que aprender a leer una hoja de balance y conocer el valor de una empresa.

Finalmente, los inversionistas siempre deben recibir asesoría financiera cualificada, y hacer su propia investigación antes de tomar cualquier decisión. Para más consejos de finanzas personales, te invitamos a seguir las redes de Tu Cochinito.