Se espera menor recaudación tributaria a causa del poco crecimiento económico
Si las estimaciones de muchos de los expertos en economía resultan ser ciertas, el crecimiento económico en México no pasaría del 1.2% este año, y mantendría una perspectiva a la...

Si las estimaciones de muchos de los expertos en economía resultan ser ciertas, el crecimiento económico en México no pasaría del 1.2% este año, y mantendría una perspectiva a la baja. Esto tendría un impacto negativo en la recaudación tributaria.
En una encuesta de expectativas realizada por Citibanamex, hay un consenso entre analistas financieros respecto a la proyección de crecimiento de 1.2%, que contrasta con la expectativa del presidente López Obrador de crecer un 2% este año.

Imagen: Especial
Más allá de lo que esto puede significar para otras variables económicas, algo que será muy patente es que la desaceleración afectará los ingresos públicos del Estado, que podrían implicar 24 mil millones de pesos si efectivamente el país crece 0.8% menos este año. Este decrecimiento equivale a 0.09% del PIB.
Esta cifra es cercana a los propios cálculos del gobierno, pues de acuerdo a sus análisis de sensibilidad, una reducción de 0.05% en el crecimiento económico deriva en 14 mil millones de pesos menos en la recaudación de impuestos.
“Se esperaba un crecimiento de 2.0 por ciento de la economía y éste se te va a 1.2 por ciento. Así, la merma rondaría los 24 mil millones de pesos. Pero, perfectamente los puede compensar la administración tributaria”, señaló Héctor Villarreal, director general del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).

Imagen: Especial
Explicado de forma sencilla, los ingresos tributarios se ven afectados cuando no crece la economía, porque se generan menos utilidades, se cae el consumo y, por lo tanto, impacta en la recaudación del IVA.
Con todo, habrá que ver qué estimaciones de crecimiento se cumplen, si las de la mayoría de los economistas o las del gobierno de la República. Asimismo, será importante medir qué tan exitoso es el énfasis que ha hecho la actual administración en combatir la evasión fiscal, las empresas fantasma y las facturas falsas, porque ello tendría un impacto muy positivo en los ingresos que pueda recaudar el Estado.
Con información de El Financiero